lunes, 16 de septiembre de 2013

La señorita Julie de August Strindberg

(Obra en un acto único escrita por Strindberg en 1888) está considerada como una de las obras teatrales más importantes de la literatura universal. La acción se desarrolla a finales del siglo XIX en la residencia de un aristócrata, padre de la señorita Julie, que nunca aparecerá, pero que siempre estará presente como un espectro en los diálogos y en las vidas de los protagonistas. Kristin, la cocinera, y su novio Jean, el criado, se encuentran en la cocina hablando de la actitud poco adecuada para su rango que está teniendo la señorita Julie durante la fiesta de la noche de San Juan: en lugar de ir con su padre a visitar parientes, se mezcla con la gente del pueblo, y baila con el guardabosque y con el mismo Jean. Con la entrada en escena de la señorita Julie, el lector se va adentrando en la psicología, el pasado, las aspiraciones, los miedos de cada personaje, y asiste a la inverosímil relación de una noche entre un criado y su ama.

Johan August Strindberg nace en Estocolmo en 1849. A los treinta años se consagra como escritor con El cuarto rojo, obra que significa el comienzo de la moderna literatura sueca. Además de pintor, fotógrafo, escultor y científico frustrado, Strindberg será un autor muy prolífico: su obra abarca, en más de setenta volúmenes, todos los géneros. Durante su exilio voluntario en varios países de Europa escribe obras de corte naturalista: entre otras, La señorita Julie. Una serie de ataques psicóticos y una penosa situación financiera le abocan a la crisis reflejada en Inferno. Su retorno a Suecia coincide con la deriva mística y el simbolismo, en piezas en las que crea nuevas formas dramáticas pre-surrealistas y pre-expresionistas que hacen de él una de las figuras más importantes de la dramaturgia contemporánea. Hasta su muerte se verá envuelto en conflictos a causa del polémico Banderas negras y la posterior "Contienda Strindberg", la mayor disputa periodística acaecida nunca en Suecia. Muere en Estocolmo en 1912: a su entierro acuden cerca de sesenta mil personas.

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